Panamá clasificó a la gran final de la Copa Oro 2023 luego de derrotar a Estados Unidos en penales. Este 16 de julio discutirá el título más importante de nuestra área contra la selección mexicana.

El equipo panameño se ha convertido en un ejemplo claro de cómo hacer las cosas bien si se pretende avanzar en un deporte como el fútbol. 

Entre la selección de Cuba y la de Panamá existen paralelismos muy evidentes; pero en la práctica un país ha ido por la senda del triunfo y el otro no.

Béisbol y fútbol

Panamá y Cuba comparten la pasión por el béisbol y en ambas naciones se considera el deporte principal. Sin embargo el país centroamericano ha desarrollado a la par ambos deportes, ha potenciado su liga nacional profesional y además ha mejorado la infraestructura futbolera. Cuba ha hecho todo lo contrario. 

Gran parte del presupuesto deportivo cubano va dirigido al béisbol y casi nada al fútbol, se desconoce el destino de la ayuda financiera que aporta la FIFA y, hasta hace muy poco, la selección cubana no podía jugar como local dentro de la isla porque no tenían un estado en condiciones.

La historia

Ambos países muestran una historia futbolera muy similar. Panamá solo asistió al Mundial de 2018, mientras que Cuba lo hizo en 1938. 

En la Copa Oro ambas selecciones han participado en 11 ediciones y ninguna la ha ganado hasta el momento, aunque ahora Panamá tiene una segunda oportunidad de hacerlo. 

Incluso teniendo caminos parecidos en el mundo del fútbol, Panamá ha crecido de forma notable y Cuba sigue estancada sin poder dar el salto cualitativo que esperamos desde hace mucho. Ellos avanzan y nosotros no, una prueba más de lo bien que lo han hecho, pero, sobre todo, de lo mal que lo estamos haciendo nosotros.

Los mejores jugadores

La gran diferencia radica en que Panamá convoca a los mejores jugadores disponibles, mientras que Cuba no lo hace; aunque muchos futbolistas desean unirse a la selección. 

Estuve buscando en la convocatoria de Panamá a los jugadores que juegan en la Major League Soccer (MLS) y son dos: Aníbal Godoy (Houston Dynamo) y Adalberto Carrasquilla (Nashville). Casualmente Cuba también tendría dos bigleaguer en su convocatoria, Osvaldo Alonso (Atlanta United) y Maikel Chang (Real Salt Lake). Además, los jugadores cubanos y panameños que militan en ligas extranjeras son muy similares, pero Cuba se niega a llamarlos.

Ellos cuentan con todos, Cuba solo con los que alguien en una oficina decidió llamar «elegibles», dejando fuera de la Selección a muchos de nuestros mejores talentos.

La liga profesional y el DT extranjero

Desde 2020 Panamá cuenta con un seleccionador extranjero. El técnico español de origen danés Thomas Christiansen Tarín ha logrado conformar un grupo estable de futbolistas. Christiansen no es de los DT más reputados o famosos, pero tiene experiencia dirigiendo en primeras divisiones europeas y como jugador estuvo en algunos clubes importantes.

En Cuba hemos pedido la presencia de un cuerpo técnico extranjero que pueda actualizar métodos, entrenamientos, ideas y conceptos. No necesitamos a un técnico estelar porque no está a nuestro alcance, pero sí uno con experiencia como jugador y entrenador de primera división de algún país con tradición futbolera.

En cuanto a la Liga, nos llevan mucha ventaja y es otro punto que nos distancia. Su liga nacional es profesional y bastante bien organizada; la cubana, además de ser amateur, es un verdadero desastre en cuestiones de organización y recursos. Hasta que Cuba no tenga una liga nacional profesional de respeto, tampoco podremos avanzar en este deporte.

Conclusiones

La única conclusión a la que podemos llegar es la que dije: Panamá, partiendo de un mismo punto, ha sabido desarrollar su fútbol haciendo las cosas bien para obtener resultados; Cuba sigue anclada a la politiquería y a la vieja escuela del deporte «socialista» y así nos va.

De momento, toda la suerte del mundo a Panamá en la final de la Copa Oro 2023. Los miramos con orgullo y con la añoranza de lo que hemos podido ser nosotros y hoy no somos.

ELTOQUE ES UN ESPACIO DE CREACIÓN ABIERTO A DIFERENTES PUNTOS DE VISTA. ESTE MATERIAL RESPONDE A LA OPINIÓN DE SU AUTOR, LA CUAL NO NECESARIAMENTE REFLEJA LA POSTURA EDITORIAL DEL MEDIO.